Del latín codex, es uno de los formatos del libro. Técnicamente cualquier libro moderno es un códice aunque el término se utiliza frecuentemente para libros escritos a mano (manuscritos) del período previo a la invención de la imprenta.
Su característica fundamental es la división en páginas, en oposición a los rollos, forma más antigua que los códices y que consistía en una larga lámina, generalmente de papiro o pergamino enrollada sobre sí misma.
